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Lo que el director se olvidó |
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Uno llega a sorprenderse varias veces al día, incluso hay
días que hasta más de una y tan sorprendido te quedas que no
sabes ni qué decir. Pero ahora fíjate, en este instante nos
acabamos de llevar una sorpresa o no sé si un pasmo al releer el
artículo sobre el Festival Medieval de Hita que figura en la
última página de la revista informativa de la Diputación
Provincial que, redundando, edita la susodicha. Pues decíamos
que al leer el artículo, del pasmo y las convulsiones se nos han
venido a la materia incolora, e incolora ha de ser, unas cuantas
cosillas que han caído en el olvido sin dolo o culpa alguna,
queremos pensar bien.
La impresión al leer el artículo es forzosamente mediática.
Todo ha ido sobre ruedas, leemos nosotros. Todo son flores,
olisqueamos nosotros. Todo bombo y platillo puede intuir de fondo
tras los chirridos de todo aquello que no engranó como debiere.
* Una flor: El señor Mínguez (vicepresidente de la Diputación
Provincial) y sus señora son punto de atracción, perdón
atención en el desfile.
* Un chirrido: Nada del número de personas en el desfile, de su
colorido, de su intención, de su lirismo si quisiere
encontrarse, no pedimos milagros al escribano.
* Otra flor: D. Francisco Tomey (presidente de la Diputación
Provincial) presidiendo las justas en el palenque, atento el
escribano que reseña lo poco adecuado de su indumentaria.
* Un chirrido: En la cena de San Pedro, condición "sine
cuanum" ir ataviado de época. D. Francisco Tomey añade a
lo inadecuado de su vestimenta gorro y capa medieval.
* Otra flor: Aparece el señor Bris, alcalde de Guadalajara, bien
hadado senador.
* Un chirrido: No se nombra a Ángel Luis Trillo e Ignacio Ayuso,
jóvenes del pueblo, y a un largo etc que se dejaron las manos y
el corazón en el Festival. Nosotros también sabemos dar
nombres.
* Otra flor: Organizan Diputación Provincial y Ayuntamiento.
* Un chirrido: Nadie se acuerda del trabajo insigne de la
Asociación Cultural. Los que hemos estado de verdad dentro del
Festival afirmamos con orgullo que ha sido posible, o mejor
dicho, las florecillas de este artículo han sido posibles
gracias al trabajo de nuestras gentes. Aunque me cabe la sospecha
de que aunque no hubiese sido posible, haber flores las habría
habido.
Con esto casi basta, pero casi vamos a decir otras cuantas y
pequeñas participaciones de la Asociación Cultural y otras
personas que no figuran o sí lo hacen de pasada en el asunto.
1º. Aportación de atrezzo para la representación teatral.
2º. Aportación del escenario, propiedad de la Asociación
Cultural, en las justas para soportar la presidencia.
3º. Aportación de un Rincón Medieval en la plaza de doña
Endrina.
4º. Aportación de pendones para ambientación del palenque.
5º. Aportación en la restauración de lanzas y venablos.
6º. Aportación en el combate de don Carnal y doña Cuaresma.
7º. Aportación en el asesoramiento de la brigada de trabajo de
la Diputación.
Basta ya o enloqueceremos. La suerte está echada, el Festival
consumado y el artículo de la revista de la Diputación
Provincial escrito. No sirve la marcha atrás y posiblemente no
habrá enmienda, pero lo que hay que decir se dice y se dice todo
y, si es necesario, habrá hasta que informarse.
Nosotros no necesitamos coronas, ni de espinas ni de laureles,
somos como somos y actuamos sin otro fin que no sea el de la
cultura y la convivencia. Verdades a medias hailas, mentiras
también y hasta verdades. Lo que no se puede hacer es obviar y
hasta faltar a la realidad que muchas veces es turbia y vidriosa,
donde se mueven peces que acaban muriendo por la boca.
La Junta Directiva de la Asociación Cultural.
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